“QUIZÁS NOS FALTAN HERRAMIENTAS QUE NOS PERMITAN EMPRENDER PROYECTOS PROPIOS”

Autor: Lic. Claudia Bazán - Publicado: 25 de Setiembre de 2017

Matías Daniel Toledo tiene 31 años, es de La Cruz, en el Departamento de Calamuchita. Acaba de graduarse en Ingeniería en Telecomunicaciones. Ingresó a la carrera en el año 2004, pero al contrario de lo que suele suceder, primer y segundo año no le resultaron complicados, en cambio la situación cambió al iniciar el tercer año de cursado.

“Me quedaron 4 materias de los primeros dos años, el primer cuatrimestre quede libre en varias y sumado a que no saque las que debía de segundo año, en el segundo cuatrimestre de tercero no pude cursar las correlativas. A partir de acá me empecé a atrasar”; recuerda.

Agrega que después vino el trabajo de medio tiempo y entonces se alejó de la Universidad a tal punto de pensar en abandonar. “Lo que me obligaba a no alejarme del todo y me motivaba era por un lado que siempre quise graduarme y por otro una ayudantía de segunda que fue de gran ayuda tanto profesional como económica”: menciona.

En el año 2012 se propuso trabajar menos horas y terminar de rendir, para el 2014 ya estaba rindiendo su última materia y luego inició sus actividades en una empresa en la ciudad de Córdoba, que le permitió concretar su práctica profesional.

Al cabo de 2 años, cambió de trabajo y actualmente se encuentra trabajando hace un año en Colsecor, también en misma ciudad.

Evalúa su formación como muy valiosa, ya que siente que durante la misma se le brindaron las herramientas necesarias para enfrentar desafíos posteriores.

En su visión, específicamente en el campo de las telecomunicaciones resulta muy difícil abarcar todos los temas y las tecnologías existentes, dados los cambios vertiginosos. “…siempre habrá contenidos que no se vean en profundidad, no obstante, fortaleciendo las bases de los mismos no hay mayor reto que comprenderlos cuando toque abordarlos”; afirma.

En cuanto al presente de los ingenieros, agrega que, si bien como toda profesión no es ajena a la realidad del país, a menos en el campo de las comunicaciones hay oferta laboral. “Y el futuro lo veo prometedor ya que para el desarrollo de un país siempre se necesitan más ingenieros y mano de obra calificada. Por ahí, pueden faltar herramientas en la formación e incentivos que nos permitan emprender proyectos propios o conjuntos”.